Buceo desde barco - nivel intermedio.El punto de inmersión Los Arcos se sitúa a dos minutos en zodiac del puerto de las Galletas, junto al punto de buceo Punta Luna. El ancla la echamos a 25m, es una inmersión donde se recomienda el uso del Nitrox para asi poder aprovecharla al máximo.
Esta vez buceamos a la deriva. En cuanto el último buceador esté bajo el agua se procede a levar el ancla para posteriormente encontrarnos el barco en la parada de descompresión con un globo de superficie. La bajada parece larga, 25,26 y 27m aqui nos estabilizamos con flotabilidad neutra sobre la arena. El paisaje es espectacular. La formación de roca es muy larga y con forma de laberinto submarino. Se colocó una primera placa conmemorativa aquí en homenaje a Jean la Morena (Jean Koller), jefe de un centro muy conocido por sus rodeos subacuáticos donde jugaba con morenas con su mano desnuda . Jean murió en la Mar en 1999, y su centro hoy en día sigue activo: la Morena.
Nuestro guía de buceo pone aire en el globo del ancla, que sube rápidamente y desaparece hacia la superficie. Nosotros nos dirigimos a través de estas paredes de varios metros de altura y vemos un primer arco que se dibuja a mano derecha. Encontramos muy poca vida submarina, esencialmente compuesta de peces trompetas pasando y volviendo a pasar a través de esta puerta imaginaria. El cielo está nublado esta mañana y la sombra se nota en este paisaje submarino cargado de historia…
De hecho, se dejó otra placa aquí después de la desaparición en buceo de Philippe Kloos, jefe del centro Coral sub en 2008. Fue Jean La Morena él que había vendido el centro a Philippe en 1996. Coral sub, uno de los primeros centros de buceo de Tenerife sigue activo hoy en día. Aquí podemos ver algunas imagenes de esta epoca, donde aparece el famoso submarino amarillo de Tenerife. Bueno el primero de los muchos que atormenta la bahía de las Galletas desde hace años… ( )
El segundo arco se encuentra a unos metros de la primera. De un tamaño más reducido invita al submarinista pasar por debajo del pórtico pero preferimos evitarlo. Algunos sargos se alejan cuando nos acercamos. Hay poca vida fija en la roca y el lugar parece desértico. Pero no vinimos para eso, todo esto ya lo sabíamos.
Si tiene tiempo de acercarse a la bóveda de los arcos, es todo un universo Macro el que nos aparece ante nuestros ojos. El uso de una linterna de buceo esta muy recomendado para aprovechar toda su belleza. Los arcos se cubren de pequeños organismos como por ejemplo el coral Muela (Phyllangia mouchezii). Es importante no pasar por debajo de los arcos ya que nuestras burbujas de aire son muy corrosivas para este medio submarino tan frágil puediendo causar daños irreversibles sobre el ecosistema. Los fotógrafos submarinos tendrán cuidado de no estar demasiado tiempo ..…
Nos dirigimos hacia el sur en dirección a alta mar. Algunos cangrejos flechas vigilan este paisaje tan aparentemente vacío. Una mancha blanca atrae mi ojo desde bastante metros. Al pie del último arco se depositó una cruz en homenaje a Jacques Yves Cousteau. En 1997 después de la desaparición del Comandante, el centro de buceo Buceo Tenerife organizó una inmersión conmemorativa en su honor.
El último arco y el más grande del los tres es imponente por su tamaño. Desemboca en la inmensidad del fondo de arena a 30 metros de profundidad. Algunos agujeros se distinguen sobre el fondo. puede imaginarse a la raya que vino allí esconderse o cazar. Seguimos a lo largo de la pared situada a mano izquierda.
A unos metros de allí y empujados por una ligera corriente llegamos a otro lugar de buceo, llamado Punta San Juan. Este lugar presenta también una formación rocosa espectacular cortando sobre el blanco de la arena. Un cardumen de roncadores majestuoso se desplaza lentamente sobre la pared dejándonos ver un espectáculo espléndido y dándonos la ocasión de dirigirnos a menor profundidad en dirección a la costa para efectuar nuestras paradas de descompresión en agua abierta.
Este punto de buceo (Punta San Juan) es muy poco visitado por los centros de buceo de Tenerife. La contaminación ambiental esta muy presente. Se encuentran detritos extendidos por todas partes sobre el fondo marino. Su procedencia es múltiple: pescadores en superficie, corrientes, emisarios… El emisario de 600 métros de las Galletas se encuentra efectivamente a muy poca distancia. Ha sido reparado varias veces pero aún no deja de contaminar los fondos marinos de los alrededores. Lo que pasa por nuestros aseos se encuentra directamente en el mar, cerca de nuestras costas y de nuestras playas..... Una depuradora así como un nuevo emisario de 1000m de longitud esta en construcción. Con los años, los detritos se dividen en finas partículas y entran en la cadena alimentaría por ingestión. Lo que tiramos al mar nos lo encontraremos algún día de una forma u otra, en nuestro plato por ejemplo. Para saber mas sobre nuestra cadena alimentaría: Fast food nation.
Esta vez buceamos a la deriva. En cuanto el último buceador esté bajo el agua se procede a levar el ancla para posteriormente encontrarnos el barco en la parada de descompresión con un globo de superficie. La bajada parece larga, 25,26 y 27m aqui nos estabilizamos con flotabilidad neutra sobre la arena. El paisaje es espectacular. La formación de roca es muy larga y con forma de laberinto submarino. Se colocó una primera placa conmemorativa aquí en homenaje a Jean la Morena (Jean Koller), jefe de un centro muy conocido por sus rodeos subacuáticos donde jugaba con morenas con su mano desnuda . Jean murió en la Mar en 1999, y su centro hoy en día sigue activo: la Morena.
Nuestro guía de buceo pone aire en el globo del ancla, que sube rápidamente y desaparece hacia la superficie. Nosotros nos dirigimos a través de estas paredes de varios metros de altura y vemos un primer arco que se dibuja a mano derecha. Encontramos muy poca vida submarina, esencialmente compuesta de peces trompetas pasando y volviendo a pasar a través de esta puerta imaginaria. El cielo está nublado esta mañana y la sombra se nota en este paisaje submarino cargado de historia…
De hecho, se dejó otra placa aquí después de la desaparición en buceo de Philippe Kloos, jefe del centro Coral sub en 2008. Fue Jean La Morena él que había vendido el centro a Philippe en 1996. Coral sub, uno de los primeros centros de buceo de Tenerife sigue activo hoy en día. Aquí podemos ver algunas imagenes de esta epoca, donde aparece el famoso submarino amarillo de Tenerife. Bueno el primero de los muchos que atormenta la bahía de las Galletas desde hace años… ( )
El segundo arco se encuentra a unos metros de la primera. De un tamaño más reducido invita al submarinista pasar por debajo del pórtico pero preferimos evitarlo. Algunos sargos se alejan cuando nos acercamos. Hay poca vida fija en la roca y el lugar parece desértico. Pero no vinimos para eso, todo esto ya lo sabíamos.
Si tiene tiempo de acercarse a la bóveda de los arcos, es todo un universo Macro el que nos aparece ante nuestros ojos. El uso de una linterna de buceo esta muy recomendado para aprovechar toda su belleza. Los arcos se cubren de pequeños organismos como por ejemplo el coral Muela (Phyllangia mouchezii). Es importante no pasar por debajo de los arcos ya que nuestras burbujas de aire son muy corrosivas para este medio submarino tan frágil puediendo causar daños irreversibles sobre el ecosistema. Los fotógrafos submarinos tendrán cuidado de no estar demasiado tiempo ..…
Nos dirigimos hacia el sur en dirección a alta mar. Algunos cangrejos flechas vigilan este paisaje tan aparentemente vacío. Una mancha blanca atrae mi ojo desde bastante metros. Al pie del último arco se depositó una cruz en homenaje a Jacques Yves Cousteau. En 1997 después de la desaparición del Comandante, el centro de buceo Buceo Tenerife organizó una inmersión conmemorativa en su honor.
El último arco y el más grande del los tres es imponente por su tamaño. Desemboca en la inmensidad del fondo de arena a 30 metros de profundidad. Algunos agujeros se distinguen sobre el fondo. puede imaginarse a la raya que vino allí esconderse o cazar. Seguimos a lo largo de la pared situada a mano izquierda.
A unos metros de allí y empujados por una ligera corriente llegamos a otro lugar de buceo, llamado Punta San Juan. Este lugar presenta también una formación rocosa espectacular cortando sobre el blanco de la arena. Un cardumen de roncadores majestuoso se desplaza lentamente sobre la pared dejándonos ver un espectáculo espléndido y dándonos la ocasión de dirigirnos a menor profundidad en dirección a la costa para efectuar nuestras paradas de descompresión en agua abierta.
Este punto de buceo (Punta San Juan) es muy poco visitado por los centros de buceo de Tenerife. La contaminación ambiental esta muy presente. Se encuentran detritos extendidos por todas partes sobre el fondo marino. Su procedencia es múltiple: pescadores en superficie, corrientes, emisarios… El emisario de 600 métros de las Galletas se encuentra efectivamente a muy poca distancia. Ha sido reparado varias veces pero aún no deja de contaminar los fondos marinos de los alrededores. Lo que pasa por nuestros aseos se encuentra directamente en el mar, cerca de nuestras costas y de nuestras playas..... Una depuradora así como un nuevo emisario de 1000m de longitud esta en construcción. Con los años, los detritos se dividen en finas partículas y entran en la cadena alimentaría por ingestión. Lo que tiramos al mar nos lo encontraremos algún día de una forma u otra, en nuestro plato por ejemplo. Para saber mas sobre nuestra cadena alimentaría: Fast food nation.
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